jueves, 1 de agosto de 2013

Varias razones por las que no te quiero

La sola idea de que vives del dinero que día a día me desgravan por mi trabajo, me provoca del desazón que cuando me levanto cada mañana pienso en qué cómo puedo dejar de pagar. Sé que eres rico, pero te gustan los privilegios que te da la casta política y una carrera que te garantiza el sprint final de tu jubilación. Mientras, a la cuneta de tu política caen jóvenes, mayores de cuarenta años y mujeres desahuciadas que se ven obligados al desempleo o a vivir con cuatrocientos euros porque tú no sabes cómo dirigir este barco.
Hubo un tiempo que este país era de oportunidades, pero por una extraña razón te empeñaste en que vivía por encima de sus posibilidades. ¡Qué absurdo slogan! vivía como cualquier europeo. Su casa, sus vacaciones, sus hijos estudiando en respetables centros públicos, con sus becas, con su sanidad envidiable, con su alimentación sana, con sus coches, y con un trabajo que abría la posibilidad de crecer e incluso de ser llamado por empresas competitivas de nivel internacional. Todos consumían en el mercado de la felicidad. ¿Quien eres tú para que decidas que esto significa vivir por encima de las posibilidades!, cuando viajas en coche en oficial, vives en una casa pagada y tu sueldo sale de mis impuestos.
Desde que has llegado al Gobierno, hace ahora año y medio, tú única obsesión es que no se visualice la llegada de los fantasmales 'hombres de negro'. No se ven, pero están. Has convertido tu vida en una publicidad engañosa y hay que reconocer que tiene su mérito. Para desviar la atención de su presencia, tienes al Floriano -que por cierto deberías despedirlo,  porque cada vez que habla te hunde-, al Pons que es el Coyote de la serie Correcaminos y la Cospedal ¡qué no tiene precio!
¡Oh!, la Merkel. Tu amiga natural y a la que todos escupimos como enemiga pública. Has dejado que Grecia sea la vanguardia de nuestros males. ¡Fijaros ciudadanos y ciudadanas en nuestro vecinos!, sino no hacemos lo que ella dice, nos aniquila. Has logrado que nuestro odio se centre en una teutona, que nos importa nada, mientras te vas de rositas. No querido Mariano, tú eres responsable de lo que está pasando en España, del desempleo y del empobrecimiento de este país. ¿Cómo puedes dormir?
Al día de hoy, ¡y mira que me esfuerzo!, no sé qué quieres hacer con España. Como buen gallego no me hablas con claridad, por los tanto intuyo. Las pequeñas y medianas empresas no tienen créditos de los bancos a los que has dado miles de millones de euros para salvarlos o ¿me estoy equivocando? Este mes de julio de 2013 un amigo ha cerrado su empresa porque no podía seguir, las deudas de clientes le ahogaron. Has diseñado un país de autónomos a los que has traspasado la responsabilidad de mantener el estado de bienestar. ¿Cómo?, si ni siquiera les das seguridad de futuro. 
Dado tu carácter, has metido en el mismo saco a las mujeres. El recorte de derechos lo entiendo. Un hombre como tú, ¡que va esperar de ellas! Mejor que se busquen marido, que cumplan con su misión de buenas amantes y se dejen de ser la columna vertebral de la economía familiar. Pero mira Mariano,  las mujeres de este país ya se quitaron el sujetador en público y no quieren volver a los fogones sin ser reconocidas, a pesar de los intentos de tu ministro de Justicia, el nuevo Torquemada de España. 
Mi pregunta es muy sencilla, en esta España sin sentido ¿que haces? Has comparecido por el 'caso Bárcenas' y lo que ha quedado es que has reconocido que 'me equivoque'. Yo añado ¿y?. Mariano, en mi larga trayectoria sé que el PP ha pagado en sobres, no sólo a dirigentes sino también a periodistas, campañas  electorales, ha prometido puestos de trabajo y hasta tertulianos.
a estas alturas del guión que has diseñado para España, me importa el dinero que has recibido de mis impuestos, pero también ¡qué carajo estas haciendo con este país y sus ciudadanos y ciudadanas! Y como al amante que no habla claro, te doy las razones por las que no te quiero.




lunes, 8 de julio de 2013

Entre poderes anda el juego y a Telefónica se le atraganta un poste

Cuando el ex presidente del Gobierno, José María Aznar, hace entrega a sus amigos de la antigua Telefónica, hoy Moviestar, privatizando el monopolio público de comunicaciones, la ciudadanía no era consciente que la feria de los despropósitos se instalaba en España, protegida por el poder que emana de la burocracia institucional. Las cuestiones sencillas se complican, algunos ciudadanos se ven amenazados sin pudor, y para colmo, la compañía cumple tarde y mal con sus clientes, siempre y cuando éstos pierdan su tiempo reclamando.
Esta coletilla viene a propósito de lo mal que Moviestar/Telefónica  lo lleva cuando un ciudadano se enfrenta a su estructura de poder. La historia que aquí se narra comienza hace poco más de tres años, en una zona rural de Asturias, por las inmediaciones de una villa llamada Pravia. Los nuevos propietarios de una finca decidieron comprar los terrenos adyacentes para extender su propiedad, en los que estaba ubicado un antiguo poste de teléfono de madera casi caído a consecuencia de los deslizamientos de tierra provocados por las lluvias y sin mayor preocupación para Telefónica por el estado que presentaba.
Los nuevos inquilinos de la finca deciden comenzar las obras para adecentar el terreno y construir un muro de contención de piedra. Se ponen en contacto con Telefónica/Moviestar para que vengan a retirar el poste, porque no quieren hacerse responsable de una posible desgracia si cae sobre la carretera. Tras más de veinte llamadas sin respuesta, deciden amenazar a la compañía con una simple frase 'O vienen o cortamos el poste'. Tras la contundente decisión, se acerca por el lugar un responsable de la Cia, que debía de ser el encargado de los cafés, porque no sabe qué respuesta dar a los propietarios ante una cuestión tan simple: 'si ustedes quieren poner el poste en mi propiedad, pagan'. La contestación del 'corre ve y dile' fue que 'Telefónica no paga dónde pone los postes' porque todo el mundo se beneficia del servicio. 
La cosa está clara, si quieren poste, paguen. Claro que Telefónica/Moviestar sorprendida por la reacción, decide enviar al ingeniero. Chaqueta y corbata, buenos modales y temple ante la adversidad. Con aplomo  se planta ante ellos y les propone colocar el poste de la discordia en una zona alejada del inmueble y, en apariencia, más desangelada. 'Mira plantan unas fabas, se enroscan y disimulan la madera'. La respuesta de los propietarios no se deja esperar. 'O margaritas. Si Telefónica quiere colocar ahí el poste, nos tiene que pagar'.
El ingeniero sabe que está ante un hueso duro de roer, pero todavía está en la fase amable y les pregunta qué cuánto piden. Entra a negociar. Lo que Telefónica crea conveniente por instalar un elemento ajeno a la utilidad de la tierra. El empleado poco a poco pierde los papeles. De nuevo,Telefónica no paga y si el ciudadano se pone muy burro, se le asusta con la expropiación. Pero estos nuevos inquilinos no se amedrantan y le recuerdan al ingeniero que una empresa privada no puede expropiar a un particular, y que el poste no se pone.
El dilema del poste queda aquí. El ingeniero se marcha. A los pocos días, un operario de la compañía se acerca al lugar, tira el poste semicaído y decide pasar los cables por encima de unos eucaliptos, todavía hoy se pueden ver. Pero la venganza de la multinacional no termina. A los pocos meses del tira y afloja, a los propietarios les llega una reclamación de la Confederación Hidrográfica del Norte por la que deben levantar el cemento, que habían echado para canalizar mejor el agua de lluvia e impedir que entrara en la casa. La broma subía a más de 7.000€. Los motivos alegados por la Confederación es que por ahí pasa un reguero.
Pero no, es agua de lluvía. El reguero, si alguna vez existió, hace muchos años que se ha desviado. Entre recurso y recurso, los 7.000€ bajan a poco más de 2.000€, pero la denuncia sigue su curso. Así, durante tres años. Pensando qué vecino es el causante de tal despropósito, mientras ellos, conocedores de que la razón está de su parte, no tiran la toalla. Hasta que un día, y después de muchos viajes y muchas horas perdidas entre papeles, aparece un comisario de la Confederación para ver si el tema se resuelve. Inspecciona el lugar, comprueba que lo hechos narrados por los propietarios se ajustan a la realidad y, ya en confianza, les comenta que la denuncia procede de Telefónica/Moviestar, respaldada por el guarda ríos, en términos tan alarmantes cómo que estaban ocasionando con esta obra un daño irreparable al río Narcea. Y que ante la magnitud de la denuncia, la Confederación se ha visto obligada a actuar. Para morir de risa. 
Claro que a nadie se le escapa que, cuando el ingeniero visita los terrenos, unos obreros estaban cementando la canalización del agua de lluvia. Hilando, hilando las fechas, blanco y en botella, leche. Conclusión Teléfonica/Moviestar, que está obligada a enterrar el cableado, está convencida que ningún ciudadano, ni de España ni del otro lado del Atlántico, se le puede resistir, pero en este caso se le ha atragantado un poste. ¡Ojalá! está historia termine bien para los propietarios de la finca y que la compañía de los amigos de Aznar corran con las consecuencias de sus actos y de los tres años de angustia y papeleo. ¿Qué precio tiene el tiempo? Bueno siempre le queda a la multinacional la posibilidad de plantar fabas, o margaritas.


sábado, 29 de junio de 2013

Cómo hemos llegado a esto


Lo que voy a narrar me parece un escándalo, y me da que pensar. Voy a contar algo que sucede cerca de mi entorno, por lo que no quiero dar nombres, pero supongo que además es representativo de lo que está pasando en este país.

Dos mujeres, las dos sin trabajo, una de ellas consigue trabajo en un restaurante, 11 horas de jornada. Habla con su jefa y le dice, me pagas la mitad y así contratas a mi compañera. Las coge a las 2, así que este empresario o empresaria, tiene a 2 empleados trabajando 11 horas diarias cada una, por el coste de un trabajador, lo cual ya me parece grave, pero lo que me escandaliza, es que ya llevan un tiempo trabajando y no les han hecho ningún contrato.

Cuando me lo cuentan y propongo (suponiendo que tengan miendo a perder el trabajo), hacer una llamada anónima a inspección de trabajo (porque me olía que no se iba a denunciar), cuál será mi sorpresa, me dicen que voy a fastidiarles el trabajo, y que ahora es "lo que hay" y hay que aceptarlo.
Sigo dándole vueltas de cómo hemos llegado a esta situación. Aquí hay dos cosas:

- Primero, el miedo del trabajador, además se está trabajando por tan poco dinero y se está haciendo aquello que se le achacaba a los inmigrantes, estamos cediendo nuestros derechos, los estamos regalando, y nos estamos olvidando del esfuerzo de tantos y tantos trabajadores que pelearon y muchos dejaron sus vidas por tener mejores condiciones laborales. ¿Cómo puede ser? cómo no nos concienciamos de que nos estamos abandonando, y,

- Segundo, qué clase de persona es el jefe o la jefa de este caso. Tiene que ser una persona rastrera, sin ninguna moral, ésto es la base de la sociedad, la base de la pirámide, cómo no va a actuar de forma amoral, deshonesta y sin honor ninguno la base cuando la cúpula está podrida. La élite de esta sociedad debería dar ejemplo de honestidad, de honradez, de ética y ser ejemplo para el resto, para la base de la pirámide.

Cómo no tomamos conciencia de lo que está pasando y que tenemos que renovar los valores, cómo hemos llegado a esto. Hay que volver a coger la bandera de una nueva ética donde no se explote a la gente, no se quiten los derechos de las personas. Yo puedo entender el miedo del trabajador, sobre todo si necesita algo de dinero aunque sea poco para poder vivir, pero lo que no puedo entender que nuestros políticos, nuestros empresarios, nuestros dirigentes, sean deshonestos, porque se corrompen a ellos y corrompen a toda la sociedad con su ejemplo.

Estoy descorazonada.

viernes, 28 de junio de 2013

Nosotros pagamos todos los platos rotos


En España, se ha convertido en costumbre que los ciudadanos paguen los platos rotos de  una mala gestión económica ya sea de la administración pública, de una institución, de un organismo o de una empresa. Cada uno de los desfases que provocan sus responsables tiene graves consecuencias: Subidas de impuestos, recortes en políticas sociales, despidos colectivos por medio de ERES o desahucios si no se aceptan las condiciones que imponen los mismos que provocaron el caos.
En la ciudad de Avilés (Asturias) existe un antiguo barrio, El Nodo, destinado a la vivienda de marineros y pescadores. Por una extraña razón, se acordó que los pisos no fueran de su propiedad, a cambio sus inquilinos pagaban una renta muy baja. Los años pasaron y los viejos pescadores dejaron esta vida. Hoy muchos de esos pisos están habitados por sus descendientes, hijos e hijas, que intentan conservar la esencia de este rincón emblemático de la ciudad.
Ah! pero llega la crisis y los gestores de la Cofradía de Pescadores se encontraron con un desfase importante en sus cuentas´. entonces vuelven la vista hacia los viejos pisos de El Nodo, como una vía para solventar una deuda, al parecer, de importantes dimensiones. La propuesta a los hijos de los antiguos pescadores tiene una hoja de doble filo o compran el piso por un valor de 27.000€ o pagan un alquiler de 300€ mensuales y constituyen una comunidad de vecinos a la que abonarán 50€ todos los meses. 
A simple vista, y dado el mercado inmobiliario, las cuantían que se proponen no parecen desorbitadas, pero se han olvidado de aplicar a la propuesta los años de renta, que durante toda su vida, pagaron los antiguos pescadores y marineros y después sus viudas y sus hijos e hijas. Los cálculos no coinciden. La Rula, como ellos dicen, aplican el precio por metro cuadrado, y los actuales inquilinos lo hacen sumando la renta que pagaron sus padres. Es decir, el valor del piso es poco más de cuatro mil euros.
La gente que vive ahí es buena gente,  trabajadora; sus sueldos no son de ejecutivo, sino que se rompen la espalda a trabajar para poder llegar a fin de mes y ayudar a la familia, mientras que los propietarios de las viviendas las están malvendiendo, alejando a los hijos de los pescadores. Las trabas crecen, no pueden ir a juicio porque no tienen dinero para hacer frente a las tasas, pero menos aún para pagar a un abogado y si no hay un acuerdo con la cofradía, tienen que abandonar la casa donde crecieron.

He aquí un ejemplo más de esta incongruencia de aplicar una política económica y de mercado engañosa. ¿Quién pone freno a este nuevo sistema que se está implantando en España, que entrega un cheque en blanco para desangrar a los ciudadanos por los errores de otros? No se reclaman privilegios, sino que se respeten los derechos.

El Caso Bretón

  Si dejamos encendida la televisión todo el día, ¿cuál es la noticia estrella? El juicio de un señor con dos policías a su lado con cara de loco que escucha atentamente y sin pestañear a los testigos.

  Lo vemos el lunes, el martes, el miércoles..., en el desayuno, comida y cena...

  Creo que ya está bien como noticia. Nos han narrado los terribles  hechos del secuestro y muerte de unos niños pequeños, por activa y por pasiva, de mil y una formas y todos los días. No puedo imaginarme ni quiero, el dolor que debe estar pasando esa madre, tiene que ser horroroso. No tengo palabras que puedan describir la angustia que debe estar pasando, ni sé qué se puede sentir, cuando se rompe y transgrede la confianza que unos niños depositan en sus mayores, no hay mayor traición.

  Dicho esto, me pregunto por qué lo mantienen en las noticias, día tras día, es escabroso, morboso y roza el sadismo, recordar una y otra vez los hechos, no a mí, sino a esa madre y a esa familia. Me entran las sospechas de que debe haber algún interés oscuro en recalcar machaconamente una y otra vez la noticia, no hay programa que no lo recoja ¿por qué? estoy atónita, qué es lo que están alimentando.

  La noticia fue en su día la desaparición de los niños, su búsqueda, las pruebas, etc., tenemos la noticia de que empezó el juicio, y la próxima noticia debería ser cuando hable la justicia, declarándolo culpable o inocente. El resto sobra.

miércoles, 26 de junio de 2013

Agua de Rosas de la noche de San Juan

El agua de rosas tiene unas propiedades mágicas para la piel, pues ayuda a equilibrar el PH, pero también para atraer el amor, la suerte y la protección.
Para la piel:
  • Equilibra y tonifica la piel grasa.
  • Calma, desinflama y refresca la piel sensible y seca.
  • Purifica y tonifica la piel normal.
  • Ayuda a entonar y rejuvenecer la piel madura.
  • Ayuda a la piel con acné

Se puede usar como tónico o sola. Se dice que es el mejor tónico para pieles sensibles, pues contiene propiedades calmantes, tonificantes y relajantes.
Sirve para eliminar el estres, los dolores de cabeza, el aturdimiento y el cansancio. Para que tenga efecto, mojar una toallita con agua muy fría, casi helada, y rociarla con unas gotas de agua de rosa. Luego se pone la toallita sobre la frente y los ojos.
También atrae el amor, la suerte y la protección porque contribuye al equilibrio de las energías, genera paz y tranquilidad y hace desaparecer las tensiones.
Miranda ha elaborado el agua de rosas la noche de San Juan, sólo su aroma la hace imprescindible en una casa.